Kai Liah fue ubicada en Costa Rica

Actualizado
  • 08/05/2024 18:39
Creado
  • 08/05/2024 17:39
Una alerta anónima ofreció detalles de su paradero y las autoridades ‘ticas’ la identificaron en una playa en una zona turística, se espera una audiencia para definir el régimen de visitas de los padres

En la Península de La Osa, Costa Rica, fue ubicada el pasado 4 de mayo en horas de la tarde la niña Kai Liah Martínez Campos, de siete años, cuyo padre, Jorge Martínez tenía más de seis meses buscándola. La pequeña estaba en la playa jugando, sola, según la foto que recibió el padre en su celular que le indicaba sobre su aparición. “Se le ve con el cabello corto y un poco más delgada”, según narró su padre a La Estrella de Panamá, ansioso de verla por primera vez desde su desaparición y reunirse con ella.

De acuerdo al relato del papá, las autoridades costarricenses ubicaron a la menor luego de haber recibido una alerta anónima de una persona “que no estaba de acuerdo con el manejo” que al parecer la madre estaba teniendo en el caso. “Una persona de manera anónima hizo la denuncia a través de los números de la Organización de Investigación Judicial de Costa Rica, y también envió un mensaje a nuestra cuenta de Instagram “Buscando a Kai Lía”, indicó el padre de la niña, Jorge Martínez.

El caso se remonta al 23 de diciembre cuando el padre solicitó a la fiscalía panameña iniciar una investigación para ubicar a su hija, luego de que su madre nunca se la entregó para pasar Navidad, como habían quedado. Desde ese momento inició la búsqueda. Creó la cuenta de Instagram “Buscando a Kai Liah”, denunció el hecho ante las autoridades del vecino país, solicitó una alerta Amber en Panamá, y viajó a México, donde pensó que estaba su hija. Ahí estuvo el último mes, en suelo azteca, tratando de ubicar a la pequeña, pero inútilmente.

Cuando llegó a Panamá, la semana pasada, recibió un mensaje en la cuenta de Instagram en el que le daban los datos de dónde encontrar a su hija. Pensando que se podía tratar de otra falsa alarma, desesperanzadora, como otras tantas que confió en el pasado, envió la fotografía a las autoridades costarricenses y, ¡sorpresa!.

Kai Liah fue trasladada a ciudad Nery, donde se practicó una audiencia preliminar. “La madre, de nacionalidad tica, fue puesta en libertad, pero la niña quedó en cuidados del Patronato de Niñez en Costa Rica”, explicó Martínez. El próximo lunes se espera una audiencia en Puerto Jiménez, en la que escucharán por separado a los padres. En ese ejercicio se definirá quién puede ver a la niña y el régimen de visitas. “Hemos solicitado a través del Ministerio de Relaciones Exteriores de Panamá que me restablezca la custodia porque hubo un (presunto) crimen en este caso”, indicó Martínez, quien tiene de testigo a la psicóloga de la niña.

Las fotos que identificaron a la niña, al parecer fueron publicadas a mediados de abril en las redes sociales, en una cuenta que ya no existe. “Era una cuenta de la madre que después desconectó”, según el padre.

Por meses la familia del lado paterno pensó que la menor se encontraba en una caravana de migrantes rumbo a Estados Unidos, “alimentado falsamente por la familia de la madre”, señaló. “Cuando mi padre fue a visitar al abuelo materno a San José, el 8 de marzo, eso le dijo”, manifestó Martínez. Esa fue la razón que lo motivó a recorrer varios estados de suelo azteca, sin imaginar que la niña estaba más cerca de Panamá de lo que pensaba.

“Ahora lo importante es que mi hija apareció y no hay derecho que le dañen la figura paterna”, dijo aliviado. Añadió que todos los esfuerzos por ubicar a su hija han sido por amor a ella, por lo “extraordinaria que es”. “Nuestro interés es que la niña sea repatriada a Panamá y vuelva a la normalidad, al colegio y con sus amigos”, indicó esperanzado en que las próximas investigaciones revelen qué pasó desde aquél diciembre de 2023. Ese será el preámbulo para que se inicie un juicio en Costa Rica, donde fue ubicada la madre, por presunta sustracción internacional de menores debido a la denuncia del padre.

La denuncia por sustracción de menores que interpuso el padre de la niña se basó en que la menor de edad cruzó a frontera de forma irregular y que la madre “cruzaba sin sellar el pasaporte por la frontera de Paso Canoas”, hecho que corroboró al comparar su estatus migratorio con las declaraciones que emitió anteriormente.

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